"Dichosos los que creen" es el lema, el motto que este año conmemora el Día Mundial de las Misiones DOMUND antes comentado.

Pocos eran los que creían que el "hombre de hielo" Kimi Raikkonen, podría ganar hoy el Campeonato de Fórmula 1 de este año, y sin embargo, así ha sido. Me alegro. No es que no quisiera que Fernando Alonso no ganara, sino que creo que es agradable comprobar que aquellos que vienen haciendo un buen trabajo (creo que es algo que nadie puede negar de Raikonnen) hasta el punto de tener posibilidades de conseguir mucho, en ocasiones, lo logren.

Salvando las distancias, me vienen a la memoria las ligas ganadas in-extremis por el Barça o, incluso, la por el mismo equipo perdida el año pasado. Es la grandeza (dual) del deporte.

Felicidades al campeón y a los finlandeses en general. Un pueblo que me cae especialmente bien (entre otros motivos, tienen su consulado en Barcelona cerca de mi casa, han sido huéspedes de amigos míos y hace dos años organicé una recepción de colegas jurídicos fineeses con quienes aún mantengo un cierto contacto).

Por cierto, viendo otra vez la fotografía (típica al final de cada gran premio)... ¿quién se sorprende ante la popularidad del botellón entre nuestros jóvenes?

Publicar un comentario

  1. Jo també me n'alegro que hagi guanyat. Després de tanta polèmica entre Alonso i Hamilton, ha acabat guanyant Raikonnen sense fer tant soroll. Felicitats!

    ResponderEliminar

Gracias por tus comentarios, críticas, ideas, sugerencias, inquietudes.
Sin tus aportes, todos himajinamos menos.

Con la tecnología de Blogger.
 
Top