Pues sí. Concretamente el viernes a primera hora, un servidor marcha una semana (día 8 de marzo regreso aquí) a Tokio.
Tengo infinidad de cosas por hacer aún. Esta noche: preparación de maleta (grande) para su llevada mañana al aeropuerto. Está ya seleccionado y encargado el hotel (pese a algunas cosas no muy positivas, pero eso ya será objeto de post cuando corresponda) y cambiada una cantidad –modesta- de yenes.
Tras la preparación de la maleta (el eterno problema de qué poner en ella) tocará remitir detalles de los viajeros a la compañía aérea, Lufthansa, a la que agradezco (pilotos inclusive) que hayan tenido a bien no complicar aún más las cosas.
Anticipo (tendré ocasión de hacerlo a lo largo de estos días) mis gracias muchas a los recurrentes viajantes al país nipón que conozco, y muy especialmente a Frans por sus imprescindibles e increíbles entradas en su blog acerca de Tokio en pocos días.
Confío que podré combinar el viaje, Himajina, el trabajo (sí, marcho pero procuraré mantener al día los mil asuntos profesionales que llevo) y demás… veremos cómo sale.
Buen viaje!
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