Aunque con pocos ánimos (hace frío, tengo sueño) acudo a la Media Maratón de Terrassa. De nuevo, me medio pierdo para encontrar la salida, a la que llego justísimo de tiempo.
El objetivo: acabar los 21 kilómetros (y algo) en menos de 2 horas, algo que no pude hacer (por dos minutos) en mi único antecedente en la distancia: la media maratón de Barcelona del año pasado.
Esta vez, contaba con la inestimable ayuda de mi nuevísimo Forerunner 305 (regalo de Reyes), que todavía no había estrenado.
Salgo bastante atrás y a un ritmo que yo creía muy lento, rodeado de gente. Sin embargo, el Fore me indicaba que sólo iba algo por encima de los 5 minutos por kilómetro, por lo que entraba dentro del tiempo deseado.
Al principio muy bien. Los kilómetros 7 a 9, bastante duros (no sólo por ser en una casi interminable subida sino porque noto que ambos pies sufren de ampollas que me acompañarán –dolorosamente- hasta el final) pero de ahí hasta el 14 ‘rodaba’ bien y contento. A partir del 14, empiezo a notar cansancio, que ‘llevo bien’ hasta el km. 18, a partir del cual toca sufrir, ya que los 3 km finales son en subida (dura y en la que he abusado de la blasfemia activa y generalizada).
Como curiosidad y ejemplo de novatismo tecnológico-atlético, el Fore se me queda sin batería en el km. 8, luego a partir de ahí iba completamente a ciegas en cuanto tiempo.
Al final: 1:49:56... por cuatro segundos ¡¡sub 1’50h!! . No puedo moverme, pero estoy de un contento…
Ets L.P.C (o sigui, com Iniesta a Stanford Bridge).
ResponderEliminarEstem amb tu, aviat et farem fora del club "sedentari" :-) per no respectar el descans i voler superar les teves pròpies marques
Ferran de Sedentaris.cat
PD: he fet una "piulada" a twitter amb enllaç a la crònica
Ei, felicitats!! Cada cop et superes!!
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