Día de Dibujar a Mahoma

BUff… que no nos pase nada.

Hoy se celebra el “Día de Dibujar a Mahoma” (Draw Mohammed Day), una jornada que, ciertamente, no tiene demasiada gracia.

Puedo entender que, para muchos, la libertad de expresión o de lo que se quiera ampare el derecho a dibujar lo que a uno le venga en gana. Pero lo que no entiendo es que, si se sabe que tal dibujo o representación como mínimo, “molesta”, se haga, ya que se está haciendo precisamente por molestar.

Si hubiera una religión ‘x’ que considerase que yo, ajeno a dicha religión ‘x’ me debo abstener de hacer algo que me gusta o quiero hacer, seguramente lo llevaría a cabo con independencia de lo que considere dicha religión (de hecho, creo que no son pocos los incumplimientos que hago y seguiré haciendo respecto de multitud de creencias y religiones propias y extrañas).

Sin embargo, lo que no haré es hacer ese incumplimiento, sólo porque pueda hacerlo si sé si con ello hay personas que, razonablemente o no, lo consideren incorrecto o se molesten.

Una cosa es “tener derecho a” y otra “ejercerlo en perjuicio de”. Ese es el auténtico debate.

Y mucho me temo que es la primera reflexión la única finalidad del “Día de” expuesto, el cual Himajina recoge pero no apoya.