Hoy tiene lugar el “Día Internacional de la Toma de Conciencia de la Tartamudez”, una jornada que pretende concienciar acerca de los problemas y la situación de aquellas personas con dificultades en el habla.
He tenido el privilegio de trabajar y mantener contacto con más de una persona afectada en un grado u otro. Y estoy convencido que dicho problema en realidad, en muchas ocasiones, no es tal. No es más grave que los que hablan con inacabables circunloquios, los que omiten el sujeto de sus frases, los que hablan con ambigüedades o quienes tiene un ritmo más pausado de lo habitual.
“Los tartamudos tienen una oportunidad única para enseñar al mundo a escuchar”. Una gran verdad, sin duda.
Actuar con normalidad, y algo de humor (que siempre es útil para distender situaciones) son la receta para encarar la situación:
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