Hoy se celebra el “Día de la Asunción”, una jornada de tradición católica (y ortodoxa) que recuerda cómo el cuerpo y alma de la Virgen María fueron llevados al cielo después de terminar sus días en la tierra.
Tal hecho, es celebrado en multitud de localidades como su “Día de”, ya que muchas fueron fundadas en amparo, nombre, recuerdo o bajo la protección de la Virgen. De ahí que, por ejemplo, sea jornada festiva oficial/nacional en España y ‘jornada grande’ en muchos pueblos. Popularmente se celebra “Santa María”; vaya, pues, un beso a mi abuela y una felicitación a todas las Marías conocidas (muchas) y a las que no (más), incluso a las María Fontaneda.
Como expliqué (¡hace tres años!) la Asunción de María al cielo es lo mismo que la Ascensión de Jesús a los cielos. Pero como en teología las jerarquías son muy importantes, resulta que Jesús al ser Dios podía subir él mismo al cielo, por serle una facultad propia; en cambio María al no gozar del atributo de la divinidad, tampoco tenía por sí misma la facultad de subir al cielo, sino que tuvo que "ser llevada" (en latín, assumpta), subida por los ángeles al cielo.
Debe decirse que, precisamente por esta festividad, algunos “Días de” tuvieron que cambiar su fecha.
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