Regresado de quince días de vacaciones, y tras tres días de agotador trabajo (es lo que tiene desentrenar), vuelvo mañana a marchar de vacaciones por una semana larga más.
Ello explica, parcialmente, el estado de semi-abandono de Himajina. En realidad, durante todo este tiempo he podido escribir notas sobre los correspondientes “Días de”, películas vistas, libros leídos, partidos del Barça y otras vivencias y sucesos. Sin embargo, cosa curiosa, o no tanto, lo que sucede es lo siguiente: cuanto menos escribo, más visitas tengo:
Como puede verse aquí, ha sido dejar de escribir y conseguir que ¡haya un domingo con 1600 visitas!
Me pregunto si habrá algún motivo técnico por el que si hay un exceso de posts la indexación es menor eficaz. Quizás sólo sea una racha motivada por algún “Día de” de especial interés al que se los visitantes han llegado al blog en base a un post de un año previo. No lo sé. Y poco importa.
No confío publicar demasiado durante los próximos días. Quizás a mediados de mes la situación se normalice (en posts y visitas). Pero sí quería dejar constancia de que, tarde o temprano, seguiremos con ello.
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