Idealista no es sólo un notable (notabilísimo) portal inmobiliario. Idealista es uno de los adjetivos que podrían calificar a aquellos/as que, por ejemplo, están dispuestos a un cambio de trabajo por otro, simplemente, porque el actual “no le aporta nada” o porque en él “no se aprende”.
Idealista es quien espera que el trabajo sea fuente de ingresos económicos, de experiencias agradables, de aportes intelectuales y de crecimiento personal.
Idealista es cambiar pese a que nada asegura que la novedad sea más instructiva (en realidad, ¡¡¡sólo es nueva!!!) y, lo que es más extraño, pese a que sí significa reducir un 48% por ciento el ya magro sueldo, por lo que se deberá recurrir a un segundo empleo para llegar a mileurista.
“Idealista” está, tanto conceptualmente como espacialmente (en un diccionario en papel) mucho más próximo a “ilusa”. ¡Qué lo sepas!
Eso sí, dos pasos más allá está la “utopía”. Y qué bonita que es ésta:
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