Quedan pendientes efemérides y comentarios acerca del viaje a Berlín, crónicas barcelonistas y alguna que otra cosa más. Y lamentablemente, creo que seguirán pendientes durante algún tiempo ya que, la vuelta al hogar, además de traerme noticias sorpresivas como goles y buen juego de Henry, ha sido acompañada de algunas otras sorpresas.
Al llegar, no había luz en el piso. Había saltado el diferencial. Además de la oscuridad, el hecho ha provocado que no me adjudique algunas subastas de ebay durante mi ausencia.
El calentador sigue sin funcionar. Antes no lo hacía bien. Ahora no sólo ya no funciona (ni siquiera mal) sino que ha provocado una pérdida de agua tal que: a) es la causa del cortocircuito que hace saltar el diferencial y b) provoca que tenga que tener el agua cortada (so pena que los embalses que rodean Barcelona bajen significativamente sus reservas).
Y la alfombrilla, con sorna, sigue diciendo "Welcome".
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