Estamos de acuerdo casi todos. El Barça es superior, pero el Sevilla es justo ganador de la eliminatoria. Mala suerte, buena actuación del portero rival, arbitraje extraño en el partido de ida, malas condiciones para jugar al fútbol… mucho se puede decir y todo cierto.
Pero no es menos cierto que al Barça sólo se le ha visto jugar de verdad en la segunda mitad del partido de hoy (con el terreno más seco y el Sevilla más cansado, todo hay que decirlo).
Se desperdició el partido de ida y algo parecido ha pasado con la primera parte de hoy, como si por alguna ley divina sin ‘trabajárselo’ uno fuera a ganar.
No ha sido así y el Barça dice un demasiado temprano adiós a una competición, algo que no seria tan grave si en realidad nos hubieran ganado (un rival superior, por ejemplo) y no, como es el caso, lo que sucede es que hemos perdido.
Y es que por mucho que me hayan gustado los últimos 45 minutos, no puedo dejar de pensar en los 135 previos.
El sábado, nuevo encuentro con el Sevilla, esta vez de Liga. Confiemos que los tres puntos no se escapen.
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