Pese a que la experiencia teatrera del sábado no fue muy satisfactoria, acudo hoy al preestreno (la obra oficialmente está en cartel desde mañana) de "L'inspector", la mejor obra de Nikolái Gógol que en versión libre de Jordi Galcerán y bajo la dirección de Sergi Berbel y con un reparto soberbio, se ha instalado en la Sala Gran del Teatre Nacional de Catalunya.
Es una comedia simpática que recomiendo fervientemente ver, especialmente por el gran nivel del reparto que la representa y que muestra su buen hacer en una obra agradecida de poner en práctica y cómoda de ver.
No me ha parecido extremadamente divertida, pero sí amable y que, más que sonoras carcajadas, provoca unas sanas sonrisas, cosa en absoluto despreciable.
De hecho, tales sonrisas supongo que deben compensar el malhumor que provoca el hecho de que en el entremedio el bar se quede rápidamente sin bocadillos ni pastas (¿qué previsiones hacen?), algo que, teniendo presente que la obra empieza a las 20:00h. y no acaba hasta pasadas las 23:00 h., no es un detalle menor.
Conclusión: Vayan, vean y comenten. Y felicidades al responsable de la escenografía (amplia, luminosa y algo brossiana).
Publicar un comentario
Gracias por tus comentarios, críticas, ideas, sugerencias, inquietudes.
Sin tus aportes, todos himajinamos menos.